Espacio Tendrel

Meditación en Casa Boletas

En tibetano TENDREL significa conexiones, establecimiento de vínculos con los que se crean situaciones beneficiosas. Esta iniciativa surge de una remodelación de la planta abuhardillada de la casa en el año 2003, creando una espaciosa y luminosa sala de unos 40 mts2, su entorno son campos de cultivo de cereales, almendras, olivos, algo de vid y pequeños pueblos esparcidos en la Sierra, un lugar tranquilo que invita al descanso.

El lugar

Espacio Tendrel es un lugar de encuentro abierto a formadores, terapeutas y a grupos que deseen realizar Talleres de Yoga, meditación, Reiki, masajes y todas aquellas prácticas y terapias orientadas a mejorar nuestra salud, calidad de vida y desarrollo personal.

Es un lugar idóneo para trabajar de forma personalizada, confortablemente en pequeños grupos, aprovechando al máximo los encuentros y talleres que programéis.

La sala dispone de material para las prácticas, colchonetas, cojines, cintas de yoga, mantas, camilla de masajes, equipo de música, video. Es una sala acogedora que invita a reunirse y practicar.

Posibilidad de organizar retiros por días en grupo o individuales.

Pide información. Os damos la bienvenida esperando que lo disfrutéis en breve.

Meditar: hacerse amigo de uno mismo

La Meditación es una forma científica de mirar nuestra situación fundamental y ver que cosas resultan útiles para enfrentarla.

Pero tal vez se nos ocurra que no hay absolutamente nada que enfrentar, tal vez deberíamos dejar que todo suceda, sencillamente y abandonar la idea de meditar. Esa es otra posibilidad, obviamente, una posibilidad muy tentadora.

Pero el motivo que nos lleva a meditar es también muy tentador: cuando nos ponemos a meditar, empezamos a ver nuestra situación psicológica de una manera muy precisa y directa.

Me parece que un problema fundamental que todos tenemos es que somos muy críticos con nosotros mismos, a tal punto que llegamos a ser nuestros propios enemigos. La meditación es una manera de reconciliarse consigo mismo, de aceptarse, de ser su propio amigo.

También veremos que la meditación no es algo exótico, tan exaltado y tan fuera de nuestro alcance que nos resulte imposible conseguirlo. Por el contrario la práctica de la meditación ocurre a un nivel sumamente personal y exige una relación muy intima con uno mismo, exige una gran intimidad.

No tiene nada que ver con lograr la perfección ni tampoco algún estado absoluto. Es compenetrarse total y realmente con lo que uno es. En otras palabras es hacerse amigo de sí mismo.